domingo, 25 de julio de 2010

Dejar que pase el tiempo con la mirada errante sin ninguna diversión, un libro siempre abierto con las hojas arrancadas una por una con rencor; en un lugar cualquiera una secundaria o carretera provincial, la luz en la ventana brillando con el ruido de camiones al pasar, y en la recepción hay un nombre falso nadie en el mundo sabe donde estoy . Ideas singulares, palabras que no paran de girar en mi interior, mentiras y verdades que parecen iguales donde suena un tambor; hay alguien ahí afuera hablando en el pasillo como burlándose de mi, se escuchan cachetadas, un ruido de cucharas y una chica dice sí, hay un ahorcado en la puerta de al lado con un cartel que dice por favor no molestar nunca mas nunca mas. El frió pega en contra mío y ahora no hay nadie que me reconcilie con volver, soy la fruta vacía con la guitarra que un día aprenderé a tocar... Y ahora que estoy solo con mis pensamientos esperare que el viento me venga a buscar .

1 comentario:

  1. Acabo de leer más de una entrada de las tuyas y me encanta. Eres muy sentimental, variada, algo filosófica... me gusta!

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